Según El Economista, que destaca a la villa pontevedresa, Galicia es una de las comunidades autónomas con mayor número de estaciones con manantiales propios abiertos al público.
El turismo de salud y belleza es una alternativa muy atractiva al clásico destino costero en España y la clave está en la importante cantidad de centros termales con manantiales propios abiertos al público. En la línea de recuperación de la medicina natural a partir del termalismo, el Economista ha publicado un ránking de las mejores aguas termales para la salud que lidera Balneario de Mondariz, destacando también la Toja y asegurando que Galicia es la comunidad autónoma con mayor número de estaciones con manantiales abiertos al público. Las Caldas de Oviedo, el Balneario de Panticosa, Vichy Catalán, Solán de Cabras, Montemayor en Placencia y el Balneario de Archena completa el listado de los ocho balnearios de España con las aguas termales más destacadas, según propiedades terapéuticas de sus manantiales.
El Balneario de Mondariz, cuyas aguas fueron declaradas de utilidad públicas en 1873 y con raíces romanas, está considerado como referente entre las principales villas termales europeas y ha sido uno de los precursores de la recuperación del termalismo tradicional cuando nadie creía en la vuelta a la medicina natural allá por la década de los noventa. Situado en una de las regiones balnearias por excelencia de la Península Ibérica, ha logrado adaptar sus instalaciones a las necesidades de ocio del siglo XXI. Galardonado con los premios al Mejor Balneario de España en 2005 y 2006, así como Mejor Spa en 2013, recientemente, ha recibido el Premio Nacional de Salud, por tres siglos de apoyo a la medicina natural. En esa línea, este mes de abril, acogerá en sus instalaciones el Congreso Nacional de Informadores de la Salud con más de doscientos participantes de toda la península.
La riqueza mineromedicinal del Balneario de Mondariz es fruto de las gotas de lluvia filtrada a través del subsuelo de esta tierra y gracias al cuál, las aguas han ido adquiriendo los minerales con el paso de los años, más de 100 años, según los hidrologos. El agua que caía en forma de lluvia en Mondariz en los años 20, es la que actualmente brota en los tres manantiales de aguas mineromedicinales: Gándara, Troncos y Sabaxanes. En Mondariz los minerales predominantes son gas carbónico, bicarbonato, calcio, sodio y hierro, que confieren al agua unas peculiares características que han ido seleccionando el tipo de termalismo que ha acudido a la villa a lo lardo de la historia. Al principio, los visitantes buscaban solución para problemas digestivos ya que el bicarbonato del agua servía para taponarla hiperacidez del estómago dolorido. Posteriormente se fueron descubriendo aplicaciones para aliviar el reumatismo y la diabetes, hasta nuestros días donde los beneficios de las aguas van desde tratamientos más tradicionales como respiratorios y antirreumáticos hasta terapias propias del siglo XXI como tratamientos antiestrés, de belleza, adelgazamiento o tratamientos antitabaco.
El área termal del Balneario de Mondariz, que arrastra una tradición de más de un siglo, es a día de hoy un centro dotado de las más modernas técnicas de aplicación de aguas mineromedicinales, ideales para tratamientos de salud, belleza y relax. Un balneario a la carta donde tiene a su disposición un servicio profesional y personalizado bajo la dirección del equipo médico. Mención aparte merece el Balneario Celta, un circuito termal único inspirado en la ancestral cultura termal celta, así como su spa, el Palacio del Agua, nombre que le dio al establecimiento termal el Nobel José Echegaray a principios del siglo XX y que trata de acercar el termalismo al ocio familiar con diferentes servicios a partir de una piscina central termo lúdica.